En el programa Plan Perfecto, emitido este miércoles por Chilevisión, la popular influencer y primera vencedora de Gran Hermano soltó una confesión que ha sacudido a sus seguidores. Cony Capelli admitió haber pasado por una bichectomy cuando tenía unos 20 años, una decisión motivada por la moda del momento y la presión de lucir un rostro "esculpido" al estilo de las supermodelos de pasarela.
¿Qué impulsó la cirugía?
Capelli explicó que, en aquella época, la cara delgada y angulosa de Bella Hadid se había convertido en un referente de belleza. "Era la tendencia de las modelos de Victoria's Secret, muy delgadas", detalló la ex‑concursante. Para ella, eliminar la grasa bucal parecía la forma más rápida de encajar en ese ideal y ganar protagonismo en redes sociales.
El arrepentimiento y sus consecuencias
Hoy, la actriz reconoce que la operación fue un error. "Lo hice y, honestamente, ahora lo lamento. Cuando bajo de peso mi cara se ve demasiado hundida", confesó mientras hablaba de su experiencia. Comparó su aspecto actual con el anterior, cuando tenía un rostro más redondo y equilibrado, y subrayó que la falta de esa grasa natural le limita al intentar mantenerse en forma.
El procedimiento de bichectomy consiste en extraer los pares de grasa bucal que aportan volumen a las mejillas, con el objetivo de afinar el contorno facial. Si bien produce resultados inmediatos, los efectos secundarios pueden incluir un envejecimiento prematuro y una apariencia “esquelética” al perder peso.
El relato de Capelli ha reavivado el debate sobre la presión estética que sufren los jóvenes, especialmente los que tienen una gran audiencia en Instagram o TikTok. Expertos en cirugía plástica advierten que decisiones impulsivas, impulsadas por tendencias pasajeras, pueden generar arrepentimientos profundos años después.
- Los riesgos de la bichectomy incluyen pérdida irreversible de volumen facial.
- La moda de rostros extremadamente delgados puede fomentar procedimientos innecesarios.
- Los influencers tienen una responsabilidad al divulgar sus experiencias con cirugía estética.
Cony Capelli no sólo abrió una ventana a su propia historia, sino que también invitó a reflexionar sobre los límites entre la búsqueda de belleza y la aceptación de la propia imagen. Su testimonio sirve como recordatorio de que, detrás de los filtros y los likes, la decisión de operarse es una carga que puede pesar mucho más con el tiempo.
